El jefe comunal lanusense y referente provincial del PRO, Néstor Grindetti inauguró un local partidario en Alte Brown junto al referente local, Pablo Maseda.
Ante un auditorio colmado de vecinos y militantes, el intendente de Lanús , Néstor Grindetti, cortó la cinta de un nuevo espacio del PRO en Adrogue junto al referente local, Pablo Maseda y al diputado provincial, Adrián Urreli, entre otros concejales, consejeros escolares y referentes territoriales.
Su discurso estuvo marcado por las críticas al gobierno provincial por el reparto de los fondos a los municipios y pidió bajar el nivel de beligerancia y confrontación en la interna de Juntos por el Cambio.
"Tenemos que estar atentos porque el gobierno provincial va a utilizar los recursos discrecionales que le manda el gobierno nacional para favorecer a los municipios propios y tratar de comprar las voluntades de los vecinos, nosotros sabemos bien que la gente ya no come vidrio, lo que no se planificó y se hizo en tres año difícilmente se pueda lograr en 6 meses", expresó Grindetti.
Y remarcó: "Le pido al Gobernador Kicillof sensatez y equidad en el reparto de los fondos, tenemos que terminar con la discrecionalidad y avanzar en un sistema de reparto automático y por ley, cada peso que entra a la provincia tiene que ser coparticipado con los municipios".
Al respecto, el diputado provincial, Adrián Urreli impulsa un proyecto en la legislatura provincial que busca coparticipar todos los fondos que llegan a la provincia de Buenos Aires desde el gobierno nacional.
Sobre la interna de Juntos por el Cambio, Grindetti fue crítico de los últimos días y pidió bajar el nivel de confrontación. "Nosotros tenemos que dar el ejemplo, los dirigentes políticos debemos dejar de mirarnos el ombligo y pensar cómo vamos a salir de la crisis, nuestras discusiones internan nunca pueden ser más protagonistas que nuestras ideas".
El dirigente gremial cargó contra un kirchnerismo que comete errores y aseguró que la gente espera un peronismo que construya alternativa a Milei. Se sumarán a la jornada de movilización y paro del 9 y 10 de abril.
Opinó el secretario General del SECLA, Orlando Machado, tras advertir la complicada situación en la que están los trabajadores, con despidos, suba de impuestos y un salario deteriorado. Así como de un Gobierno nacional que paraliza obras.